viernes, 30 de noviembre de 2012

5 cosas... que no entiendo de este país

Como ya saben, hay muchas cosas que me pregunto a diario, a veces son las mismas que se repiten con insistencia (porque no encuentro explicación) y otras van surgiendo algunas nuevas que se presentan así, espontáneamente, en la vida cotidiana de una...

Por ejemplo:

Primera cosa: ¿Por qué uno tiene la idea de que Suiza es un país políglota de toda la vida y que son todos muy listos y muy piolas? Es matador que uno, sea del país que sea, tenga un POQUITÍN de complejo de inferioridad ante la super habilidad con las lenguas de los suizos, y que después resulte que no son taaaaan ultra buenísimos como nos pensábamos. Cada uno habla la suya y sanseacabó. Están los germanoparlantes (que, tal como su nombre indica, hablan perfecto alemán), los francófonos (lo mismo de lo mismo) y los del cantón italiano que son más italianos que los parientes de Pavarotti.

Ésto no es una duda, es una suposición: Lo que yo creo es que unos pocos de cada lado, los que se tocaban entre fronteras, un día, ya un poco cansados de sus compatriotas respectivos, se debieron reunir y decir: "Mirá, a mí lo que me gustaría es subir un nivel... no sé, en todo.. yo que sé, por ejemplo en tecnología -es que la tecnología suiza uffff, es bárbara. También podríamos decir que sabemos mucho de arte y de quesos, que los franceses saben, pero en Suiza está ¡el Gruyere!... y además, podríamos decir que los italianos de Suiza no son tan vagos ni tan poco limpitos, ni tan desordenados, porque son suizos, claro". Entonces decidieron reunirse y aplicar una buena política de marketing para venderse muy bien como suizos pero seguir manteniendo cada uno su identidad intacta y vivir tan panchos. No es mal negocio, la verdad, estos tipos saben, porque hagan lo que hagan todo el mundo tiene buen concepto de ellos. ¿O no?

Otra cosa que no entiendo: ¿lo de ser tan caros, también es parte de su high level o sólo es para tocar un poquito las pelotas? (uy, Entschuldigung!).

Cosa número 3: Si lo de la puntualidad también es importante para darles buena fama ¿por qué no se aliaron con algún británico también?

Cosa número 4: ¿Por qué no hay tiendas de chinos? ¿es que para todo pasan controles de calidad y ahí van muy justitos o es que ya serían demasiadas nacionalidades que añadir a la bolsa? ¿Adónde va la gente a comprar cuando necesita un colador de 18 cm de diámetro un domingo a las 6 de la tarde?

Quinta duda existencial/autocuestión: ¿por qué desde que estoy acá en la barra del buscador el nombre de mi blog aparece con ".ch" ... ¿es que yo también me cambio de camisa cuando quiero? ¡cómo soy! O mis principios son muy débiles y me vendo al mejor postor o ya estoy demasiado mayor para ir a la par de los avances tecnológicos y no entiendo nada (debe ser esto último, casi seguro que sí).

Acá todo combina muy bien: la modernidad al fondo con el parapente y la señora en el tren a punto de tomarse su té



martes, 27 de noviembre de 2012

El comienzo de la transición

Después del torbellino de tareas que me tocó finiquitar la semana pasada, vino la recompensa en forma de maleta, bufanda y guantes, y transición a una nueva etapa. Varias circunstancias me trajeron hasta acá y tengo la suerte de estar disfrutando del descanso en una ciudad preciosa que todos los días me ofrece rincones sorprendentes.

Para que se hagan una idea general, acá abajo les pongo unas fotitos que muestran un poco de lo que veo cada día cuando me levanto. En pequeños capítulos les voy a ir contando en palabras o en imágenes las peculiaridades de este paradero actual mío donde voy a intentar cumplir una serie de objetivos importantes a la par que interesantes.












Ésto es sólo un avance. Si estoy inspirada estos días les voy a ir contando cómo esta gente vive las fiestas. Las calles de esta ciudad, igual que las de la mayoría de las centroeuropeas, se emborrachan -literalmente- de Navidad. Y a mí, que me encanta todo lo que esta fiesta implica a nivel puramente superficial, ésto me tiene enamorada (perdón por la frivolidad pero debo decir que es asi. Crecí en un país en el que la Navidad se celebra en vestido de tirantes bailando cumbia en el patio y empaquetando los regalos en papel con motivos cumpleañeros, el pesebre es libre de albergar animales tropicales y los Reyes son simples mensajeros de los parientes a efectos regalísticos... Con todo respeto a quienes la viven de manera religiosa: para mí la Navidad es el mejor carnaval).

lunes, 12 de noviembre de 2012

Multiculturalidad y sensaciones

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¿Vieron ésto? Somos multiculturales. Oigan, si vienen de lejos, me encantaría que dejen un comentario. Eso alegra el día ¿vio?

Y cuánto me gustaría ver por un agujerito esa habitación de colores, donde una persona con el escritorio todo desordenado y un café enfriándose en una taza junto al ordenador lee tranquilamente una de mis últimas entradas mientras afuera llueve. La sensación es rara, buenísima, como cuando alguien te toca el pelo. O como cuando al sacarte los calcetines te rascás la marca que dejaron en la piel. O como cuando te metés en la cama con las sábanas recién cambiadas. O como cuando te hacés un nuevo corte de pelo y te gusta como te quedó. O como cuando encontrás aparcamiento justo en la puerta. O como cuando alguien te llama sólo porque sí....


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Estoy

Ando media desaparecida. Lo sé. Perdón, perdón. Cuando yo sigo un blog y veo que durante varios días no hay novedades me da lástima. Que no les dé a ustedes, eh. Que no, que no.

No crean que no pienso en contarles todo lo que anda pasando, pero es que no tengo casi tiempo de sentarme. Ya saben, próximo traslado, dejar todo cerrado y limpito, saludar (no despedir, no, no) a los amigos y preparar alguna que otra maleta. A todo ésto, comerme todo lo que tengo en la despensa y el congelador (uufff... :-) y reducir a lo mínimo los objetos merecedores de transporte.

¡Pero si nos vamos acá a la vuelta! Cerquita, muy cerquita. Lo que pasa es que uno tiende a estar muy rodeado de objetos y es una costumbre linda por una parte, agobiante por otra, sobre todo en caso de mudanza.

No pasa nada. Al final siempre sale todo bien y bordado. Eso sí, uno acaba queriendo meter los pies en agua tibia.

Lo importante es la organización. En estos casos me gustaría tener todas esas virtudes que tienen las personas a las que quiero (y admiro): la capacidad de organización de Isabel, el humor de Manolita, el sentido práctico de Marga, la destreza con las gestiones de Mati, la habilidad para el orden de mi hermana Fernanda y la energía de mi hermana Ceci. Un cóctel así me facilitaría mucho las cosas.

Por suerte cuento con ellas para todo así que esto va a ser pan comido (¿por qué se dirá "pan comido"? ¿es fácil comer pan? Se vé que sí).

Y bueh, todo ésto era para pedir paciencia y perdón por la ausencia intermitente en este blog. No me gusta descuidarlo pero ahora mismo la inspiración está guardada en el fondo de una caja que pone "Frágil".

Sigan ahí, eh. No se vayan.


viernes, 2 de noviembre de 2012

La estación más acogedora y los amigos modernos

A estas alturas del año me entran unas ganas bárbaras de recogerme en casa y disfrutar de cosas lindas e intentar que todo parezca como en este video. Batirme el pelo con el peine al revés y quedar con un estilo como "despreocupado", hornear tartas que parecen sacadas de la mejor patisserie de "Paguí", llamar a esos modernos que van por la calle con camisas de cuadros e invitarlos a un té sentados en mi suelo de madera de iroco nórdico con aires escandinavos o tejer con lana gorda pullóveres que tanto pueden servir de chaleco, de alfombra del Pirineo para el salón o de agarraderas para la tetera caliente. Y se vé que eso mismo debieron pensar estos de Kinfolk, porque metieron todo eso en la batidora y el resultado les quedó la mar de chic (ojito: los modernos dicen "shick").

Por circunstancias de la vida va a ser difícil hacerlo en un par de meses (mi casa patas arriba, mudanza, traslado, nuevos planes, nueva vida), así que me deleito con imágenes que poco tienen que ver con mi rutina actual de hacer cajas, barrer pelusitas por el pasillo o decidir si ésto lo llevo y aquéllo no.

Podrán observar que en la realidad ni las casas son así de divinas ni el desorden parece tan ordenado, ni los amigos son tan estilosísismos (no se ofendan porque eso es lo que más me gusta de ustedes), ni uno toma meriendas maravillosas en el muelle de madera que hay en el lago de al lado de casa. Bueno, eso al menos no me pasa a mí. Quizás los lectores de este blog son glamurosísimos (oh la la!) y acaban de sentirse excluidos. Si es así, je sui desole, no volverá a pasar.

Esto es como mirar las fotos de las revistas de decoración o de moda, sabemos que nada es real pero nos gusta revolcarnos en nuestra faceta ilusa-utópica y disfrutamos recreándonos la vista...


el enlace está acá

(sigo sin saber cómo colgar un video de vimeo en blogger... tutores voluntarios ofrecerse en el apartado "comentarios", gracias...)

Blogging tips